De la mayor crisis a una nueva oportunidad de negocio. La brillante estrategia de Airbnb.


A mediados del año pasado, con los casos de covid-19 creciendo por todos lados y una incertidumbre terrible en todo el mundo, muchos fueron los negocios (grandes, medianos y pequeños) que vieron derrumbarse lo que había tardado años en construirse; la pandemia no tuvo piedad y afectó a todos en menor o mayor medida haciendo sufrir incluso a aquellos gigantes del comercio y la economía que veían asombrados un aumento en sus pérdidas día con día. El sector turístico fue sin duda, uno de los que se llevó la peor parte con una caída del turismo internacional que alcanzó picos históricos de hasta un -74%, pérdidas internacionales por 1,1 billones de dólares y un aproximado de 120 millones de empleos perdidos en el sector.

Brian Chesky, cofundador de Airbnb vio a mediados del fatídico 2020 cómo en tan solo 8 semanas, las cancelaciones en reservas de su plataforma de alojamientos, perdía el 80% de ganancias de su negocio… parecía el fin. No obstante y como los grandes, un momento de crisis dio para replantear el rumbo de su negocio y resurgir de las cenizas para volver a emprender el vuelo. ¿Cómo? A base de cambiar su estrategia de marketing, en palabras del propio Chesky “Meter un nuevo chip en nuestros clientes y transformar un lugar para alojarse, en el propio destino”. El modelo se readaptó y la gente confió; se trabajó sin descanso y a marchas forzadas por crear 100 mejoras en su servicio para convertir cada experiencia de hospedaje en un viaje seguro que rompiera con el prototipo de vacaciones, convirtiendo cada alojamiento en una posibilidad para ir a trabajar a otro lugar, viajar o incluso, quedarse a vivir en otro destino. Las fechas para reservar se hicieron más flexibles y esto permitió que los viajeros tuvieran más posibilidades de filtrar sus búsquedas. ¿El resultado? Antes de concluir 2020, la compañía protagonizó la mayor salida a Bolsa del año en Estados Unidos, valorando la empresa en más de 101,000 millones de dólares y un disparo en sus acciones de hasta un 143% en su debut, logrando así, una de las recuperaciones más impresionantes de todos los tiempos para una empresa dedicada al sector turístico.

Sin duda, una hazaña que nos deja un enorme aprendizaje y la firme idea de que los momentos más difíciles, pueden ser periodos de grandes oportunidades que nos permitan crecer y alcanzar objetivos inimaginables.

Veremos cómo pinta lo que resta de 2021 para Airbnb y si esta increíble capacidad de resurgimiento, es lo suficientemente fuerte para mantenerlos a flote y con éxito.

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