Reclamos-millonarios-por-derechos-de-imagen-en-la-industria-discografica


Parecería que algo hubo de profético en aquella foto donde un bebé sumergido bajo el agua iba tras un anzuelo de un billete de dólar. 30 años después, Spencer Elden, el protagonista de esa legendaria imagen que hoy forma parte de la cultura pop y que dio imagen a la generación grunge por allá de 1991, hoy se encuentra en busca de una indemnización por los “daños que ha sufrido y seguirá sufriendo por el resto de sus días”. ¿Será? La duda se apodera inevitablemente del colectivo cuando la postura del joven (hoy de 30 años) ha sido tan cambiante al respecto de su histórica participación en la icónica foto; pues hasta no hace mucho, mostraba orgulloso su tatuaje en el pecho con la leyenda “nevermind” y contaba la increíble anécdota de cómo sus papás habían aceptado hacerlo partícipe de la experiencia a cambio de 200 dólares. Posteriormente, en 2016, en una entrevista concedida a la revista Time, mostraba su inconformidad por no haber recibido ni un solo dólar de los millones que generaron las más de 30 millones de copias que se vendieron del disco alrededor del mundo.

El fotógrafo Kirk Weddle, responsable de la imagen, sostuvo contacto durante muchos años con Elden y llegó a declarar a su favor en varias conversaciones con The Guardian para asentir que efectivamente, todos ganaron dinero con la imagen, todos, menos él.

No es la primera vez que este tipo de demandas ocurren en el ámbito musical. El primer disco de Roxy Music, de 1972 que protagonizó la modelo Kari-Ann Muller posando como una pin-up de los años 50, fue un chiste por el que recibió 20 libras antes de pasar a ser una de las portadas más icónicas. Luego está el famoso caso de Meat is Murder de The Smiths (1985) en donde tomaron la foto de un veterano de guerra del que no solo se tomó su imagen, sino que se alteró con una leyenda de su casco en la que se leía “La carne es asesinato” en lugar del original “Haz la guerra, no el amor”.

La actriz Kate Murtagh hizo la pose de la estatua de la libertar para la portada del Breakfast in America de la banda Supertrampen 1979. ¿Qué recibió a cambio? Nada, los integrantes de la banda se acercaron a ella para decirle que si le gustaría salir en la portada de su disco, pues la admiraban mucho y eso fue todo para que ella aceptara.

Así podríamos seguir con una larga lista en la que sobre todo, niños, son el blanco perfecto para obtener una postal memorable, gratis o ridículamente mal pagada; ahí está el caso de Siamese Dream de The Smashing Pumkins, el niño de War del disco de U2, un chico llamado Peter Rowen que era hermano de un amigo de Bono, llamado Guggi. ¿La diferencia? Tanto las gemelas que se abrazan en el disco de los Smashing, o Peter (quien hoy es un conocido fotógrafo) es que ninguno de ellos ha reclamado o pedido algo que según explican, no parece que les falte. Sino que más bien lo tomen como una anécdota que enriquece sus vidas y nada más.

No obstante y con el nacimiento de los NFT (Non Fungible Tokens) que funcionan como una nueva clase de activos digitales únicos instituibles y no intercambiables, les permite asignarles una representación física o digital que no se puede copiar, el arte y su valor, alcanzarán nuevos resultados de los que no dudamos, muchos de estos protagonistas de portadas de discos, podrían convertirse en auténticos millonarios.

LIT INVESTMENT CENTER

Área de Marketing

julieta.deltoro@lit.mx

LIVE, INVEST, TRANSCEND